José María Cambil, director de CEDEPA: “nuestra filosofía no es otra que seguir ofreciendo a las personas con discapacidad intelectual oportunidades y experiencias laborales”

José María Cambil, director de CEDEPA: “nuestra filosofía no es otra que seguir ofreciendo a las personas con discapacidad intelectual oportunidades y experiencias laborales”

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Conversamos con el director de CEDEPA tras el reconocimiento otorgado por el ayuntamiento de Sevilla por ofrecer oportunidades de empleo a personas con discapacidad

A comienzo de este mes, el Centro Especial de Empleo de Aturem recibía un reconocimiento por ofrecer oportunidades de empleo a personas con discapacidad intelectual, en el marco de la celebración de un acto organizado por COCEMFE junto con la Fundación Integralia DKV «La diversidad y la inclusión como ventajas competitivas de las empresas en el contexto de los ODS” .

El reconocimiento fue entregado a José Luis Suarez, gerente de ATUREM, por el teniente de alcalde del Área de Hábitat Urbano y Cohesión Social del Ayuntamiento de Sevilla, Juan Manuel Flores Cordero.

El centro especial de empleo CEDEPA es un referente para la empleabilidad de las personas con discapacidad intelectual desde 1977, año de su creación. Conversamos hoy con José María Cambil, director del CEE y responsable económico de Aturem, entidad de Plena inclusión Andalucía, que atesora una dilatada experiencia al mando de este importante centro de empleo.

 

¿Cómo han acogido este reconocimiento a la trayectoria de CEDEPA?

Lógicamente con mucha alegría. Nos enorgullece esta distinción por parte del ayuntamiento de la ciudad en la que llevamos tantos años luchando por el trabajo de las personas con discapacidad intelectual y además viene en un momento en el que podemos afirmar que, pese a las dificultades derivadas de la pandemia, hemos contratado a más de 50 personas en estos últimos dos años.

 

José María, lleva alrededor 30 años trabajando en Aturem, ¿qué cambios significativos puede señalar desde entonces?

CEDEPA empezó como Centro Ocupacional, exactamente como taller pre laboral. Al principio envasaban bicarbonato y hacían cosas muy básicas, hablamos de diez trabajadores. Hoy día contamos con una plantilla de más de 100 personas y varias líneas de negocio. Actualmente, la mayor parte de los trabajadores tiene discapacidad intelectual, pero poco a poco vamos abrimos el abanico y cada vez contamos con más personas con distintas discapacidades (ya sea física, sensorial y algunas relacionadas con la enfermedad mental).

 

¿Cómo ha ido variando y aumentando vuestro volumen de trabajo? 

A mi llegada empezamos a dedicarnos principalmente al almacenamiento y también al manipulado y la encuadernación, pero la crisis de artes gráficas llegó pronto y, actualmente, de los cinco almacenes que teníamos, queda uno. 

Ahora tenemos como fuente principal de trabajo el servicio postal, es decir, reparto de cartas, certificados, burofax y paquetería. Esta línea es la que más ha crecido y se adapta muy bien a las necesidades de las personas con discapacidad intelectual porque es un trabajo con un proceso muy mecanizado. Nuestra filosofía siempre ha sido la de crear líneas de negocio para ofrecer trabajo a las personas con discapacidad, trabajos que nos permitan ofrecer apoyos y adaptarnos al perfil del trabajador, por ello nos dedicamos al manipulado industrial, mensajería y valija, almacenaje y distribución y además estamos abriendo otras como son los servicios de limpieza y lavandería, estas dos últimas todavía muy incipientes.

 

¿Cómo es el funcionamiento de un Centro Especial de Empleo como CEDEPA? 

CEDEPA funciona como una empresa, dividida en departamentos en los que hay un responsable con una visión organizativa y empresarial y varios monitores, profesionales que forman, supervisan y hacen seguimiento y apoyo laboral al personal.

 

¿Cómo se aborda la metodología del Empleo con Apoyos en una empresa tan numerosa como CEDEPA?

Los puestos de trabajo que ofrecemos requieren una adaptación sencilla, pero aún así, siempre hay un período de formación inicial. Por otro lado, los monitores de los que hablaba detectan las posibles necesidades de los trabajadores y las derivan a la figura de la psicóloga, Laura Rodríguez Contreras. Esta profesional a su vez está al frente de la coordinación de un departamento de Apoyo a las Personas con Discapacidad. Y por supuesto contamos también con los recursos de Aturem.

Por lo general, lo que más se adapta es la carga de trabajo. Por ejemplo, si un cartero o cartera presenta dificultades para leer, necesitará un volumen de reparto ajustado a lo que puede alcanzar en una jornada. 

 

¿Cómo afectan las Reformas Laborales al trabajo y el funcionamiento de los CEE?

No muy bien. El espíritu de los CEE es crear empleos de duración determinada para que las personas con discapacidad aprendan un oficio y puedan tener una experiencia laboral para salir al mercado y poder trabajar en empresas normalizadas. Si la prioridad es la contratación indefinida, estas personas raramente van a tener la posibilidad de tener más experiencias laborales fuera del CEE. 

Otro escollo es la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI en adelante). Los CEE tenemos que contratar mucha mano de obra porque la mayoría de los perfiles de nuestros empleados son de una productividad menor. Si suben el SMI nos afecta profundamente, con el agravante de que en nuestra comunidad no hay adelantos de las subvenciones por parte de la administración como ocurre en otros sitios, sino todo lo contrario.

 

¿Qué medidas por parte de las administraciones sería necesario implantar para que los CEE tuvieran todo lo que necesitan?

Es muy sencillo: si la Ley de contrato reservado a CEE se cumpliera podríamos ofrecer muchos puestos de trabajo a personas con discapacidad en diferentes administraciones públicas y lograríamos un gran crecimiento.

 

¿Cómo se vislumbra el futuro de CEDEPA a corto plazo, hacia dónde se dirige?

Estamos comenzando unas líneas de actuación que pueden dar mucho de sí cuando logremos sumar sinergias, como son los proyectos de limpieza y lavandería que tenemos entre manos, y estamos muy centrados en ocupar lo que se conoce en el mundo de la cartería como la última milla, que es la entrega en mano. El último kilómetro en una entrega postal necesita de obra humana sí o sí, así que mientras que podamos queremos seguir cumpliendo con nuestra filosofía, que no es otra que seguir ofreciendo a las personas con discapacidad oportunidades y experiencias laborales.

 

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