Liberto Esteban Serrano ha descubierto uno de sus talentos gracias al proyecto de empleo personalizado en el que participa
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Liberto Esteban Serrano, en el centro de la imagen, es una de las personas con discapacidad intelectual y del desarrollo que participa en el pilotaje de Empleo Personalizado de Plena inclusión Andalucía. El proyecto, que se desarrolla bajo la coordinación de Plena inclusión España, se basa en una metodología cuyo objetivo principal es la creación de nuevos puestos de trabajo, diseñados pensando en una persona y en colaboración con empresas. Es una metodología que ha demostrado resultados para todas las personas, y de forma especial con perfiles como el de las personas con dificultades de acceso al empleo debido a sus grandes necesidades de apoyo.
Durante todo el proceso, las personas participantes son protagonistas de su propia búsqueda de empleo y de la negociación con la empresa, aunque antes han de pasar por otras fases. Una de ellas es la fase de descubrimiento, en la que se realizan actividades cotidianas de la persona y actividades nuevas, propuestas por el profesional de acompañamiento, en función de una habilidad, interés o talento detectado y que la persona no ha realizado antes. “Tratamos de descubrir las habilidades, intereses y talentos de las personas a través de la información previa que tengamos en los servicios de empleo o de otros profesionales de apoyo”, explica Miriam Cañadas, anterior responsable del programa en Plena inclusión Andalucía. “Visitamos su hogar y su barrio, las personas con las que se relacionan para conocer cuáles son sus rutinas y a la vez vamos observando las empresas locales”, añade.
En el caso de Liberto, durante esta primera fase han podido llegar a un punto, según cuenta Ester Guerrero, profesional técnico de empleo personalizado que lo acompaña, en el que han descubierto su gusto por la cultura y la historia. Así, la propuesta de Ester como actividad nueva fue realizar una visita a La Alhambra para que Liberto pudiera observar a los guías turísticos, ver cómo era el trabajo que desempeñan, y pensar si eso le gustaba como puesto de trabajo para él. “La fase de descubrimiento se basa en compartir mucho tiempo con la persona participante para conocer bien cuáles son sus habilidades y talentos. También nos reunimos con los familiares, allegados o personas importantes para ellos, con la finalidad de conocer cuáles son sus gustos y habilidades desde otra perspectiva centrando la planificación de futuras acciones en la persona”, detalla Ester Guerrero.
“Siempre me han interesado los libros y he leído muchos”, asegura Liberto, “pero, en parte, me he llevado sorpresa en la fase de descubrimiento. Sabía que tenía ese talento, que me gustaba el tema de la historia, pero no me veía como guía”. Además de encontrar una posible vía para desarrollar su vida laboral, Liberto ha superado algunas limitaciones gracias al trabajo desarrollado durante esta fase, tal y como él mismo relata: «por mi timidez me cerré esa puerta, pero poco a poco he descubierto que si te gusta algo no tienes que tener una barrera, tienes que ir a por ello». Ester Guerrero también confirma este cambio en él, ya que asegura que ha roto su timidez a la hora de hablar con ella y a la hora de abrirse a los demás.
Próximamente, y dentro también de las actividades del proyecto de Empleo Personalizado, Liberto podrá realizar su primera experiencia como guía turístico en el Parque de las Ciencias de Granada, concretamente en el espacio Biodomo, porque es un apasionado de las plantas. Para su primera ruta como guía, invitarán a otros participantes del proyecto y de esta manera, Liberto podrá empezar a sentir cómo puede llegar a alcanzar su sueño, que él mismo nos cuenta: ”uno de mis sueños es tener un trabajo para tener una autonomía, un dinero, y también independizarme, no estar siempre bajo las alas de mis padres».