Plena inclusión Andalucía valora positivamente las medidas tomadas por el IAAP en la celebración del examen de Auxiliar Administrativo para personas con discapacidad intelectual
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El examen tuvo lugar el pasado 23 de enero bajo unas medidas especialmente diseñadas para evitar posibles contagios de la Covid-19 y para favorecer a las personas con discapacidad intelectual
Estaban convocadas 775 personas para cubrir 75 plazas de Auxiliares Administrativos
Un total de 632 personas con discapacidad intelectual -de las 775 convocadas- acudieron a la realización de las pruebas selectivas para cubrir 75 plazas del Cuerpo de Auxiliares Administrativos de la Junta de Andalucía celebradas el pasado 23 de enero en toda la región. Estas pruebas, convocadas por la Secretaría General para la Administración Pública, de la Consejería de la Presidencia, Administración Pública e Interior han llevado por vez primera al Instituto Andaluz de Administración Pública, IAAP en adelante, adscrito a la citada Secretaría General, a poner en marcha una serie de medidas ideadas para el desarrollo del ejercicio con el mínimo riesgo posible de contagios por la Covid-19. Una actuación que Plena inclusión Andalucía valora positivamente dado el alto grado de satisfacción tanto de opositores y opositoras y de sus familias, que los han acompañado en todo momento, como de los profesionales de sus entidades que acudieron a los centros de examen como personal de apoyo.
Medidas pioneras
Este ha sido el primer examen de oposiciones a nivel autonómico celebrado en Andalucía bajo restricciones de movilidad vigentes debido a la pandemia, por lo que el IAAP, junto con la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica ha adoptado un estricto protocolo de medidas preventivas respecto a la COVID-19. Para completar el proceso y hacerlo lo más adecuado posible para las necesidades de las personas con discapacidad intelectual, tanto el protocolo de administraciones públicasestablecido por Plena inclusióncomo el Cuaderno de Buenas Prácticas de Empleo Público, “han sido de gran interés para la elaboración de estas medidas. Así se han tenido en cuenta cuestiones como la ratio de colaboradores en relación con los opositores, que el personal colaborador tenga experiencia en el trato con personas con discapacidad intelectual o el hecho de facilitar espacios para acompañantes”, nos aseguran desde el propio IAAP.
Además, el IAAP ha contado con la colaboración de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía, además de otros departamentos de la administración andaluza, como la Dirección General de Personas con Discapacidad e Inclusión, los Centros de Valoración y Orientaciónen las provincias, y personal colaborador en tareas de vigilanciay auxiliares de otros centros directivos y de centros de la Consejería de Educación, en los que se han establecido todas las sedes para la realización de estas pruebas.
Entre las medidas, una de las más valoradas ha sido la posibilidad de poder realizar el examen en cada una de las 8 provincias andaluzas, al contrario de lo que ocurría anteriormente, cuando solo existía la posibilidad de realizarlo en Sevilla y Granada. “Que no hayamos tenido que desplazarnos ha sido un factor muy importante. Hacen el examen en su zona de confort, conocen la zona, el tráfico, y así pierden nervios y llegan muy tranquilos”, explica Ana Molina, preparadora de oposicionesde Plena inclusión Andalucía en Huelva. Para ella, además, “la organización ha sido buenísima, el acceso muy puntual y las medidas nuevas muy acertadas, como la de que haya habido una persona acompañando a cada opositor a su aula, eso ha ayudado mucho a que hayan realizado el examen más relajados”.
Otras actuaciones para rebajar los posibles contagios durante la realización del ejercicio han sido el acceso escalonado, la reducción de aforo, en concreto 50 personas por centro y 5 personas como máximo por aula, o la habilitación de una sala de espera para los acompañantes-uno por opositor y 5 como máximo por sala-. En este sentido, Diego Barba, una de las personas que se han presentado al examen, asegura que gracias a esas medidas se ha sentido muy seguro y tranquilo en todo momento, “además de que no se oía ningún murmullo como pasaba antes, cuando la gente podía estar fuera de las aulas esperando”. De hecho, según han asegurado algunos profesionales vinculados a Plena inclusión Andalucía que estuvieron presentes en el examen, en muchas aulas no se llegaba ni a 5 personas.
Firme compromiso
El compromiso del IAAP con las personas con discapacidad intelectual o del desarrollo ha sido firme y así lo demuestran los pasos que se han dado desde el organismo. En noviembre de 2019 el IAAP y CERMI-Andalucía firmaban un conveniocon el objetivo de desarrollar acciones dirigidas a fomentar el conocimiento de la discapacidad, la inclusión de personas con discapacidad en el empleo público y la mejora de las acciones formativas para concienciar a los empleados públicos sobre discapacidad.
De hecho, el secretario general del IAAP, Pablo Fanegas de Villar, sostiene lo declarado en su día por la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía, Rocío Ruiz, cuando afirmaba que “la adaptación de este tipo de pruebas es una garantía de los principios de igualdad de oportunidades, accesibilidad y compensación de la desventaja que debe primar en los procesos selectivos de empleo público. Además, el desarrollo efectivo de estas pruebas son la muestra del compromiso de la Junta de Andalucía en favor del empleo de las personas con discapacidad intelectual. Desde el Gobierno andaluz, se valora lo mucho que estas personas tienen que aportar al servicio público y, así, tenemos que dar ejemplo al resto de la sociedad”.
También la colaboración entre Plena inclusión Andalucía y el IAAP ha sido muy estrecha. Prueba de ello es el ‘Premio de Empleo Público y Discapacidad Intelectual’, en la categoría de ‘Trayectoria’, concedido por Plena inclusión al organismo durante la celebración en Toledo de un seminario técnico sobre empleo público para personas con discapacidad intelectual hace ahora un año, galardón que recogió Natalia Márquez García, Directora General de Recursos Humanos y Función Pública. Al respecto, Juan Carlos González, tristemente fallecido el pasado 6 de febrero, manifestaba su agradecimiento a la “inestimable labor de Plena inclusión Andalucía por contribuir desde su compromiso ético, con apoyos y oportunidades, a que cada persona con discapacidad intelectual o del desarrollo y su familia puedan desarrollar su proyecto de calidad de vida, así como a promover su inclusión como ciudadanos de pleno derecho en una sociedad justa y solidaria”. Desde aquí nuestro agradecimiento a su labor como director del Instituto Andaluz de Administración Pública y nuestras condolencias a sus familiares, amigos y compañeros de trabajo.